Te hago raíces
En mis pies.
Las enredo en cada paso
Lento, al caminar.
Más debo decir,
Que hay momentos
En que me obligo
A desenredar.
De no hacerlo,
Sus nudos
Bloquean tu recuerdo
Y nunca fue mi intención
Dislocar esta conexión.
Sin embargo y sólo por las dudas,
Te invoco en el frio invierno
Que va quemando las hojas
Hasta dejarlas sin aliento.
Caliento mi casa en tu espera
Así, como la última vez,
Para que no percibas
La soledad húmeda
Y devastada
Con que los muebles
Extrañan tu presencia.
Callo una y mil veces
Mis temores,
Los niego, los entierro.
Sé que una vez entregada
Mi alma no tendrá dudas.
El miedo no tocará mi puerta
Y el desgano desaparecerá
En busca de otra víctima barata,
Sin ganas de luchar.
Pero hasta el momento,
Solo te veo resbalar
Entre mis dedos,
Con la misma facilidad
Con la que una y otra vez
Me callas y te vas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario